Leiomioma uterino calcificado
Mujer de 72 años de edad con antecedentes patológicos de diabetes mellitus tipo II, cardiopatía isquémica, enfermedad de Parkinson, hipertensión arterial, intervenida por hidrocefalia con derivación ventrículo-peritoneal. La causa de la muerte fue una hemorragia cerebral intraparenquimatosa. Como hallazgo casual destaca una masa redondeada de 7 × 7 cm, calcificada, pediculada, subserosa y localizada en el fondo del útero. Una vez extraída se procedió a la eliminación de partes blandas mediante cocción.
El mioma uterino, cuya denominación más correcta es leiomioma uterino, es el tumor más frecuente del tracto genital, con una incidencia de 2,0-12,8/1.000 personas/año y su prevalencia clínica es aproximadamente de un 20-30% en las mujeres mayores de 30 años.
Suelen ser asiento de fenómenos degenerativos como: degeneración hialina, quística, grasa, maligna, necrosis (degeneración roja), infección y calcificación. En este último caso se requiere de mala vascularización. Los depósitos de calcio son radiopacos. Los leiomiomas uterinos son a veces asintomáticos (alrededor de un 30%), y cuando presentan sintomatología está relacionada con dolor, leucorrea, trastornos menstruales (hipermenorrea) o procesos de compresión (tracto urinario o digestivo).
Las formas calcificadas no son frecuentes en nuestro medio. En las autopsias judiciales normalmente es un hallazgo que no correlaciona con la causa de la muerte. El interés forense radica en su potencial capacidad individualizadora, en los casos de fallecidos no identificados(putrefacción, sucesos con víctimas múltiples, restos óseos) una vez efectuado el cotejo con los datos antemortem.